viernes, noviembre 24, 2006

CRÍTICA: EL VIAJERO DE LA TUNDRA de Jiro Taniguchi

Este volumen que nos presenta la Editorial Ponent Mon, con sentido de lectura oriental, consta de una serie de 6 relatos.

Con su habitual maestría al narrar, Taniguchi nos transporta a ese sentimiento, que todo ser humano debería tener respecto a la naturaleza.

Es un alegato en defensa de ese tesoro que tenemos en nuestro planeta, un ecosistema rico que muchas veces no somos capaces de proteger, y entender lo afortunados que somos de tener a nuestro alcance tanta belleza.

Y nos demuestra con estas narraciones cortas que la naturaleza es más sabia, en muchos sentidos, que el propio ser humano.

Vamos a hacer una breve referencia a cada uno de los 6 relatos.

El viajero de la tundra

Este relato nos cuenta una teórica historia que vivió Jack London en Alaska, concretamente en la región de Klondike, en la cuenca del río Yukon, cuando era un simple buscador de oro, a finales del siglo XIX. De este novelista, a caballo entre los siglos XIX y XX, Taniguchi nos quiere narrar una historia inédita, jamás contada por London en sus historias ambientadas en Alaska.

Taniguchi nos intenta trasmitir que la avaricia del hombre le puede llevar a la perdición, y tan ciego está que no ve el peligro que se cierne delante de sus propios ojos. Y sería capaz de dar la vida de manera totalmente inconsciente e irracional con tal de lograr su ansia de riquezas y poder. Pero muchas veces la propia naturaleza acaba poniendo a cada uno en su sitio.

El páramo blanco

Narra la historia de dos hombres encargados de transportar el cadáver de un lord desde Alaska hasta su país natal. Nos enseña como hay privilegios de clase, y un cadáver es repatriado desde un país lejano si éste es el de una persona de un estrato social más elevado. Este relato es una reconstrucción de la primera parte de Colmillo Blanco de Jack London. Es la supervivencia del ser humano ante las condiciones más adversas. Y el instinto de supervivencia de los animales para sobrevivir en su entorno en situaciones límite.

Hacia la montaña

Historia de gran belleza. Nos narra la lealtad de un perro hacia su amo. El amor de un padre por su hijo muerto. Y, en consecuencia, la venganza que lleva al padre a dar caza al oso que mató a su hijo. Y su perra, esa “fiel amiga del hombre”, que aunque estando preñada, hará todo lo posible por proteger a su amo.

Kaiyosejima

Un paisaje casi virgen. Un pueblo de pescadores con encanto, todavía no invadido por los turistas. Dos niños, casi solos en el mundo, viven con la misma familia (sus tíos de él y sus vecinos de ella). Ella un poco más mayor que él, se encarga de protegerlo de los demás niños, y esa actitud autoprotectora hará que sientan muy próximos el uno del otro.

Shokaro

Leemos una historia de la convivencia de unos vecinos extraños en una casa dividida en diferentes estancias. El protagonista es un dibujante de mangas, que nos preguntamos si podría ser el propio Taniguchi. Vive en un ambiente de soledad, dibujando su obra “Cloroformo”, pero en relación constante con sus vecinos. Un relato diferente al resto, donde la naturaleza no es el tema central, pero donde podemos atisbar cómo una sociedad tan masificada como es la japonesa, vive en enormes aglomeraciones, llegando a vivir una persona en un cubículo que mide un Ken de ancho (1,818 m.). Viviendo tanta gente en espacios tan reducidos, ¿puede llegar a sentir soledad una persona, teniendo en cuenta que la cultura y educación japonesa es respetuosa con sus vecinos y congéneres?

Regresar al mar

La pasión de un hombre por estudiar la vida de las ballenas, y en especial el seguimiento de una que le salvó la vida. Relato de gran belleza y lleno de sentimientos. ¿Será verdad la leyenda de los inuit de que existe verdaderamente un cementerio de ballenas?

Nos descubrimos nuevamente ante el Maestro Taniguchi. En este compendio de relatos nos hace un canto a la naturaleza. Esa naturaleza dueña y señora de todo ser viviente.

Un dibujante de trazo detallista, preciso y preciosista, al servicio, esta vez, de la inmensidad de la naturaleza.

Una manera de llegar a entender que la naturaleza es la que impone, al fin y a la postre, su ley. Todo acto irracional venido de la mano del hombre, al final tiene que rendir cuentas ante la jueza que es la naturaleza. Ella impone sus leyes, dicta sentencia y al final no tenemos más remedio que obedecerlas.

Y Taniguchi es el artista idóneo para plasmarlo sobre el papel.

Un cordial saludo.

2 comentarios:

Ximo dijo...

Impresionante como siempre Taniguchi. Es el autor de comic que más emociones me aporta con sus lecturas, ademas me pasa una cosa muy curiosa, intento siempre tener un par de obras suyas por comprar, no sea que me quede sin Taniguchi durante largo tiempo.

Luis Tamiche dijo...

La compañía española firmó un contrato con el grupo hotelero estatal
Cubanacán, para operar los nuevos hoteles Plaza Colón, Ordoño y
Arsenita, en presencia del ministro cubano del Turismo, Manuel Marrero,
y el presidente de Iberostar, Miguel Fruxá, quienes participan en la
Feria Internacional de Turismo, FitCuba 2017, con sede en Holguín.
Fuente: galapagos islands honeymoon cruise