jueves, enero 17, 2008

EL FUTURO TERRORÍFICO DE UN BLOGUERO: Un TraZero en vías de extinción

Este post que hoy tenéis la suerte (o desgracia) de leer es sólo para enseñaros, explicaros y, sobre todo, ilustraros con hechos e imágenes en qué se puede convertir un pobre y humilde bloguero si el paso de los años hacen mella en él, lo hacen achacoso, desaparece la beldad de aquella juventud ya perdida y se convierte en sombra de lo que era.

Si a toda esta retahíla de funestos sucesos que son, según dicen, ley de vida, le añadimos sufrir en tus propias y demacradas carnes y ser víctima de un virus "comiquero" mortal que asola toda la faz de la Tierra, y, naturalmente, terminas pereciendo por tal motivo (u otro cualquiera que la portentosa imaginación de uno puede llegar a crear), puedes llegar a "vivir" la no-vida de un no-muerto, cayendo tan bajo que más aún sería imposible, convirtiéndote en un zombi, en un muerto viviente que deambulará por la red de redes buscando que alguien se apiade de él o le haga el mínimo caso requerido en estas ocasiones, escuchándolo y, sobre todo, leyéndolo, o sea, que a pesar de todo continúe siendo "alguien" dentro de la comunidad bloguera y no un simple y terrible desecho, el cual provoque que sus palabras se las lleve el viento, no recibiendo ni paz ni descanso eterno, sino el constante deambular sin ton ni son, sin rumbo fijo, por toda la eternidad, padeciendo el "ostracismo" más agónico, por lo que es comprensible y razonable que uno pueda acabar con esta impresentable guisa. ¡¡¡Lamentable!!! ¡¡¡Patético!!! ¿No creeis? ¿O puede haber, en algún lugar recóndito, una mínima posibilidad de salvar mi pobre y desesperada alma?

Y, así, en la primera imagen podéis contemplar a un servidor aún manteniendo y conservando, a duras penas, eso sí, una cierta lozanía, gracias a la mano prodigiosa del maestro Luis García (¡¡¡qué tiempos aquellos!!!).

Y, en cambio, en la segunda imagen, un consumado profesor, teórico y dibujante como es Álvaro Muñoz, se dio cuenta de lo apurado que ya estoy a estas alturas, y no tuvo más remedio que dibujarme imaginándose cómo acabaré dentro de poco tiempo, siendo un muerto viviente, que no sabe donde caerse "muerto", que intentará deambular de salón en salón, de blog en blog, como buenamente pueda, soliviantando al personal.

¡¡¡Qué bajo ha caído ya este TraZero que os habla!!! ¡¡¡Dónde iremos a parar irremediablemente!!!

Y, a pesar que estas horribles visiones os hayan podido producir terribles y continuas arcadas, sólo espero por el bien de la Comunidad TraZera que os apiadéis de todos nosotros y hagáis el siempre reconocido esfuerzo por vuestra parte de leernos (y, si no es mucho pedir, comentarnos) día a día, hasta que el cuerpo (o lo que quede de él) aguante (y no caiga a trozos).

¡Ah!, y si alguno conoce un antídoto que cure mi terrible mal, por favor, por favor, ¡¡¡Que me lo diga a la de yaaaaa!!!

Un saludo cordial un tanto demacrado.

3 comentarios:

Susana dijo...

Pues como todos acabemos así ...

Ximo dijo...

Pero que bueno es Luis García que es capaz de mejorar hasta al original, así que no te quejes EduXavi, je, je.

Y visto lo visto, esto lo que pide es una crisis en los blogs infinitos, pero ya ...

EduXavi dijo...

JA...JA...JA..., se nos ha vuelto chistoso el Ximito. Que sí, que sí, que ya no tenemos veinte añitos, pero que el dibujo hiperrealista de Luis supera al original, te lo crees tú. Es una copia "perfecta" del original, ¿queda claro?

Y sólo espero que esta moda de los zombies no se extienda fuera de la gran y pequeña pantalla, de las novelas y de los cómics, porque si no apañados estamos.